Consejos para no sentirte un bicho raro en Gran Bretaña

¿Tienes pensado ir a vivir o visitar Gran Bretaña en un futuro próximo o lejano? Bueno, si la pandemia lo permite, claro. Pues aparte de planear qué vas a visitar o a dónde vas a dormir, entre otros temas logísticos previos a un viaje, sería conveniente que le echaras un vistazo a ciertas normas sociales para no encontrarte en situaciones comprometidas.

Todos conocemos algunos de los estereotipos comunes de los habitantes del Reino Unido, como que son muy puntuales, que les apasiona el té, que son muy educados, etcétera…, y de hecho muchos de ellos son verdad.

Empecemos con la puntualidad. En efecto, los ingleses tienen fama de ser muy puntuales, y la verdad es que lo son, bueno suponemos que alguno habrá que no lo sea, pero en general suelen llegar a todas partes a la hora establecida. Llegar tarde puede ser considerado como algo de mala educación, así que si quedáis con alguien y veis que no vais a llegar a tiempo, no dudéis en llamar a la persona en cuestión y comunicarle que vais con retraso. 

Hay que decir que lo de ser puntual es una cualidad que está bien tener y que no es exclusiva de los Británicos. No creo que a nadie se le ocurra llegar tarde al trabajo o a la consulta del médico o a un espectáculo, más que nada porque las consecuencias de esta impuntualidad no son nada agradables.

Se suele ser impuntual con familia y amigos, así que es muy posible que encontremos a algún que otro Británico saltándose la norma y el estereotipo de la puntualidad.

Lo de no saltarse la cola es sagrado. Ni se os ocurra intentarlo si no queréis recibir una buena reprimenda por parte de las personas que estoicamente y pacientemente han estado esperando antes de que llegarais vosotros. No os valdrá ninguna treta, por más sofisticada y bien planeada que esta sea. No os va a salir bien y os convertiréis en personas non-gratas, así que, a armarse de paciencia y a hacer cola como todo el mundo.

Educados por encima de todo. Las palabras “please”, “sorry” o “thank you” son probablemente las que más podréis escuchar en el transcurso de cualquier interacción verbal. También veréis que los británicos se disculpan por todo, y piden las cosas con mucha educación.

No intentéis dar dos besos a una persona británica la primera vez que la conocéis, ya que para ellos este tipo de saludo puede resultarles un poco violento. Eso sí, cuando ya os hayáis hecho buenos amigos, entonces ya os podréis dar un abrazo y uno o dos besos en la mejilla. La manera habitual de saludarse es con un apretón de manos o simplemente esbozando una sonrisa, o bien con una leve inclinación de la cabeza.

Por cierto, no os olvidéis de guardar una cierta distancia con vuestros interlocutores británicos, necesitan mantener un cierto espacio vital; de hecho, esto es ahora más fácil de hacer gracias a la pandemia.

No hagáis preguntas muy personales o delicadas al principio, ya que valoran mucho su privacidad y esto podría incomodarles un poco, ya cuando haya más confianza os podréis atrever a pedir información más personal. Y otra cosa a tener en cuenta, no soportan muy bien el contacto visual prolongado, así que no os los quedéis mirando fijamente.

Si os invitan a casa de alguien se espera que llevéis algún tipo de regalo, ya sean bombones, flores, vino… Si decidís ir a tomar algo en un pub con un grupo de amigos ingleses tened en cuenta que os tocará pagar una ronda. Es decir, no se acostumbra a pedir la consumición de manera individual sino para todo el grupo, así que controlad el número de personas que van a ir con vosotros.

Si viajáis en transporte público, tened en cuenta que los británicos son muy respetuosos con la gente mayor o con discapacidad, así que se asume que si no quedan asientos libres, estos se cedan a dichas personas.

Por último pero no menos importante, sabed que si vais a casa de algún nativo inglés, seguro que lo primero que os ofrecerá será un té. Ya sabéis que el té es la bebida más consumida en el Reino Unido, se bebe a todas horas, así que, si queréis anotaros un punto con vuestros nuevos amigos ingleses, aceptad una buena taza de té, aunque no os guste demasiado.

En fin, con estos pequeños consejos vuestra estancia en el Reino Unido no creará ningún cataclismo ni alterará la vida cotidiana de sus habitantes.